El programa de Exenciones de Acuífero en el programa de Control de Inyección Subterránea (UIC) de la Ley de Agua Potable (SDWA) permite que ocurra cierta actividad de petróleo, gas y minería en aguas subterráneas que de lo contrario estarían protegidas como fuente de agua potable.
“El programa de exenciones de acuífero permite la inyección directamente en acuíferos una vez protegidos y esencialmente “descartar” las posibles fuentes de agua subterránea”.
Se supone que el programa UIC protege las fuentes subterráneas de agua potable de los pozos de inyección, ya sea para la eliminación de los residuos de petróleo y gas, o la inyección de fluidos para una mejor recuperación (ER, por sus siglas en inglés). Sin embargo, las Exenciones de Acuífero proporcionan una forma de evitar estas protecciones y traspasar las aguas subterráneas a la industria del petróleo y gas, esencialmente “descartando” las posibles fuentes de agua potable.
Las reglas para eximir a los acuíferos tienen más de 30 años de antigüedad y no reflejan la escasez de agua actual y futura, los cambios en la población y las tecnologías de tratamiento de agua y perforación de pozos en constante cambio. Los residentes de muchos estados productores de petróleo y gas dependen en gran medida del agua subterránea y han tenidos que recurrir cada vez más a acuíferos de menor calidad y profundidad. Los criterios de exención obsoletos pueden estar exponiendo las fuentes vitales de agua subterránea a la contaminación.
La supervisión del programa de Exenciones de Acuífero ha estado ausente tanto a nivel estatal como federal. La EPA y las agencias estatales no han cumplido con los deberes reguladores básicos, como el mantenimiento de registros, mapeo y la aplicación de los límites de las exenciones.
En California, una falla masiva resultó en que miles de pozos recibieran permisos para inyectar en acuíferos no exentos. Estamos trabajando en California para reformar el programa de UIC allí y cerrar los pozos de inyección ilegales.
A nivel federal, se necesita mayor supervisión. Clean Water Action pide a la EPA emprender una serie de medidas:
- Imponer una moratoria inmediata en la concesión de nuevas exenciones hasta que se establezcan nuevas normas
- Actualizar los criterios reguladores de las exenciones y el análisis requerido para reflejar las circunstancias cambiantes y proteger más las posibles fuentes de agua potable, incluyendo oportunidades completas y transparentes de aviso público y capacidad de comentar sobre cada solicitud de exención de acuífero.
- Los nuevos criterios no deberían permitir que los acuíferos estén exentos únicamente porque son productores de minerales, hidrocarburos o energía geotérmica.
- Divulgar un inventario completo en formato de base de datos y espacial de todas las decisiones de exención de acuífero actuales y pasadas. Realizar una investigación sobre si la inyección se está llevando a cabo en acuíferos no exentos y si se han otorgado exenciones, pero no se han utilizado.
- Investigar si un proceso de aprobación simplificado para que los estados implementen programas de UIC relacionados con la actividad de petróleo y gas ha jugado un papel en los problemas de supervisión y gestión del programa de Exenciones de Acuífero.
El programa de UIC está incluido en la ley de agua potable hito de la nación porque su propósito es proteger las fuentes subterráneas de agua potable. La EPA y las agencias estatales deben mejorar la supervisión y la aplicación de las exenciones del acuífero. Se necesitan reformas a largo plazo para salvaguardar el futuro de nuestra agua potable del petróleo y el gas.